Esta mañana me levanté pensando en muchas cosas, más que todo, recordando aquellos momentos en los que las noches se me iban planificando el futuro. Es un poco irónico el pensar que ya tengo los pies puesto en ese futuro, y no veo como mi planificación sirvió para algo. No es lo que yo esperaba, pero con sus
variaciones, me hace feliz.
Cuando iba yo a pensar que en serio la vida iba a tomar el rumbo que le diera la gana? A la verdad que la vida es bien huevona. Ni me preguntó lo que yo quería hacer con mis planes. Dónde quedaron mis viajes? Dónde quedaron mis trabajos fabulosos en las ciudades increíbles?
Uno a veces piensa que las cosas a todo mundo le pasan porque así lo planificó. Golpes cabrones del destino que colocan a la gente en posiciones de poder o en posiciones de desgracia. Todo es una colaboración de lo que has logrado, los sentimientos que has demostrado y las intenciones hacia los demás. Válido suficiente?
Bueno... continúo filosofando.
Mi día de ayer fue lo que llamarían los gringos "fulfilling". Ayer me tocó re-conocer a mi nueva jefa. Fue mi compañera indirecta de trabajo por todo este año. Una mujer a la que he admirado todo este tiempo porque es una mujer luchadora y profesional. Ahora me toca conocerla en otra faceta de su vida.
Mientras tanto, sigo tratando de hacer de tripas corazones con un compañero de trabajo que puede llegar a desesperarme.
La vida está en una balanza. No hay más que eso, nada es perfecto.
Cómo lidiar con esto, cuando nos pintan un color de rosa en la universidad? Por que a mi me dijeron lo profesional que iba a ser y o mucho que iba a alcanzar, después de tomar un bachillerato que únicamente existe para que la universidad haga dinero porque a fin de cuentas son pocos los que terminan con una salida.
Mi día está llenito de estrés... horrible. Tengo que aprender a quitarme el trabajo de encima cuando llego a la casa.
Al menos en días así.
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